La parcela se sitúa al final de la alineación de la manzana con dos esquinas circulares. Se ha diseñado un edificio donde las líneas rectas son protagonista en la composición de la imagen externa. Las viviendas se relacionan con el exterior mediante amplias terrazas longitudinales. La entrada del edificio y el viario exterior quedan separados por un espacio abierto de transición que se ha diseñado como un área verde interior, dotada de ajardinamiento e iluminación, creando un espacio de calidez en el acceso peatonal.
Los materiales principales son el hormigón visto de los elementos salientes, el vidrio, el monocapa en blanco para la fachada principal, celosías de chapa de acero pintado en color oxido y un sistema de paneles ranurados en planta baja. Los paneles ranurados permiten la ventilación natural del área de garaje al mismo tiempo que filtra la entrada de luz natural durante el día, por la noche este sistema de paneles proyectaría sobre el acerado exterior la luz interior generando la imagen de un sólido (o pedestal) de luz sobre el cual se apoya el resto del edificio.
Los materiales principales son el hormigón visto de los elementos salientes, el vidrio, el monocapa en blanco para la fachada principal, celosías de chapa de acero pintado en color oxido y un sistema de paneles ranurados en planta baja. Los paneles ranurados permiten la ventilación natural del área de garaje al mismo tiempo que filtra la entrada de luz natural durante el día, por la noche este sistema de paneles proyectaría sobre el acerado exterior la luz interior generando la imagen de un sólido (o pedestal) de luz sobre el cual se apoya el resto del edificio.
